A pesar de que el tiempo cada día es más fresco, esto no quita que sigamos practicando ejercicio al aire libre. De hecho, el otoño es una estación fabulosa para seguir realizando actividades en el exterior. Algunas semanas vienen acompañadas de temperaturas suaves y de una explosión de colores que se produce en los espacios naturales. Caminar y practicar senderismo suave son excelentes maneras de mover el cuerpo. Siempre es recomendable pasar un tiempo bajo la luz de sol y disfrutar de la naturaleza que nos rodea.
En una de estas salidas intenta quitarte los zapatos y pon los pies en la tierra o en la arena de la playa durante al menos veinte minutos. De esta forma lograrás una conexión especial con la Tierra. Este contacto beneficia tu salud de muchas maneras:
- Equilibra el sistema nervioso simpático y el parasimpático que controlan las funciones y actos involuntarios.
- Reducción de la inflamación, en especial en las extremidades inferiores.
- Incrementa los niveles de energía.
- Fortalecimiento del sistema inmunitario.
Hemos perdido el hábito de caminar con los pies desnudos, una práctica que, como quien dice, se ha venido haciendo hasta hace poco. Al usar zapatos y no salir tan a menudo perdemos ese contacto tan necesario con la Tierra. Según los expertos, esta posee una carga negativa en su superficie, tanto en el suelo, los mares y la arena. El cuerpo humano necesita de esa carga para funcionar de manera óptima. Por eso se recomienda caminar descalzos, nadar en el mar o simplemente tumbarnos en el suelo. La carga negativa se introduce en nuestro cuerpo y con los electrones contrarrestaremos los radicales libres, la inflamación y nos cargaremos de energía. También este tipo de prácticas combate contra la “energía sucia” que nos bombardea constantemente, como por ejemplo la procedente de nuestros dispositivos móviles.
A este fenómeno se le ha venido a llamar grounding o earthing, y poco a poco ha ido ganando seguidores en todo el mundo. Aquí en este enlace encontraréis una web que funciona a modo de plataforma para dar a conocer sus beneficios. El doctor James Oschman, experto de la medicina energética, además de licenciado en biofísica y doctorado en biología por la Universidad de Pittsburgh llegó a afirmar: “En las publicaciones y prácticas de diversas culturas de todo el mundo, se pueden encontrar reportes subjetivos que indican que caminar descalzo sobre la Tierra mejora la salud y brinda una sensación de bienestar. Por una variedad de razones, muchas personas están poco dispuestos a caminar descalzos en el exterior, a menos de que estén de vacaciones en la playa”.