La enfermedad celíaca es una enfermedad que se puede manifestar en cualquier momento de nuestras vidas, aunque habitualmente la estadística nos hace asociarla con la infancia. Se trata de una enfermedad autoinmune que afecta a personas que son alérgicas al gluten. Esta afección crónica daña el intestino delgado y dificulta la absorción de nutrientes en la dieta. Los síntomas de la enfermedad celíaca en la infancia pueden incluir dolor abdominal, diarrea, hinchazón, pérdida de peso, retraso o detención del crecimiento y desarrollo, anemia, fatiga y cambios de humor.
Es importante detectar la enfermedad celíaca en los niños con el fin de evitar complicaciones a largo plazo. En algunos casos, puede desencadenar otros trastornos de salud, como la diabetes tipo 1, la tiroiditis autoinmunitaria, la enfermedad de Addison y otras afecciones autoinmunitarias.
Tratamiento de la enfermedad celíaca en la infancia
El tratamiento para la enfermedad celíaca en la infancia persigue evitar los alimentos que contienen gluten. Para esto, es necesario seguir una dieta libre de gluten, que puede incluir alimentos como frutas, verduras, carnes, aves, pescados, huevos, leche, queso, yogur, arroz, maíz, patatas y legumbres. También deben evitarse alimentos procesados que contengan gluten, como pan, galletas, pasteles y cereales.
Si se sospecha que un niño tiene enfermedad celíaca, es importante que sea evaluado primero por su médico de cabecera o un especialista, quien podría confirmar el diagnóstico a través de análisis de sangre, biopsias intestinales o una combinación de ambos. El diagnóstico temprano y el tratamiento adecuado pueden ayudar a prevenir complicaciones graves en la salud a largo plazo y permitir que el niño crezca y se desarrolle adecuadamente.
Portrait of beautiful child having breakfast at home.
¿Qué debe hacer un celíaco cuando come fuera de casa?
Cuando un celíaco come fuera de casa, es importante que tenga precaución y revise cuidadosamente el menú para asegurarse de que no contiene gluten. En algunos casos, puede ser necesario hablar con el chef o el personal del restaurante para confirmar que los platos son aptos para personas con celiaquía. También es recomendable llevar consigo algún tipo de alimento al que sabemos que somos tolerantes, como puede ser alguna barrita sin gluten, en caso de que no haya opciones sin gluten disponibles en el lugar dónde se va a comer. En resumen, la clave es estar informado y tomar las precauciones necesarias para evitar el consumo de gluten.
Ahora con la llegada del verano, es muy probable que los menores realicen actividades fuera de casa, como por ejemplo campamentos y colonias. A la hora de elegir la mejor opción, debemos estar atentos a los servicios de comedor que ofrecen en estos lugares. Hay empresas, como es el caso de English Summer, que están perfectamente preparadas y, lo que es más importante, concienciadas para atender las alergias e intolerancias alimenticias. Tal y como os explicamos en este artículo English Summer dispone de fichas técnicas en cada uno de los menús informando de los distintos alérgenos que contienen para tener un control total a la hora de servir la comida a cada niño. Si el alumno no tolera algún tipo de alimento o necesita alguna dieta especial, se le servirá un menú adecuado en correspondencia a sus necesidades.
