Tu hijo ya no es un bebé y, por tanto, su alimentación debe ir adaptándose a su nueva condición. Ha llegado el momento de introducir en la dieta del niño los alimentos reservados hasta ahora a los adultos.
Además, es importante que hagas de la comida un acontecimiento familiar, que coma con vosotros compartiendo el mismo espacio y tomando, en la medida de lo posible, el mismo menú , para que se sienta integrado y mayor.
Hero Baby explica muy bien en su web cómo debe ser la alimentación de tu hijo a partir de los 12 meses de vida, finaliza la importante etapa del destete y el pequeño comienza a formar parte de la alimentación de los “mayores”. Se trata de un momento crucial, en el que hay que garantizar al niño una dieta equilibrada, capaz de cumplir los siguientes objetivos: asegurarle un crecimiento y desarrollo adecuados, evitar carencias nutritivas y prevenir enfermedades.
Esto se conseguirá a través de una alimentación completa, que le aporte la cantidad necesaria de vitaminas, sales minerales, carbohidratos complejos, proteínas y grasas. Existen una serie de normas a seguir para procurar al niño una alimentación lo más equilibrada posible:
- Ofrecerle a menudo frutas y verduras frescas, ya que son una importante fuente de vitaminas, minerales, antioxidantes y fibra.
- Sustituir la leche de continuación por leches específicas para niños de 1 a 3 años, las llamadas leches de crecimiento. Evitar introducir todavía la leche de vaca, ya que las de crecimiento incluyen nutrientes que no contiene la leche de vaca y que son necesarios para el desarrollo del niño en esta etapa.
- Acercar su dieta a la de los padres, sustituyendo el plato único por un primer y segundo plato.
- Procurar que tome proteínas, al menos, una vez al día, en forma de carne, pescado, huevo, queso o legumbres.
- Limitar los azúcares y las grasas animales, pues pueden originar posteriores problemas de obesidad.