Siete razones por las que tomar kombucha

Ya os hemos contado aquí, en Sanitum, que una de las últimas incorporaciones a nuestra dieta ha sido el té kombucha. Para mí, ha sido todo un descubrimiento y, por ello, os quiero animar a que lo probéis (si aun no lo habéis hecho) para poder empezar a disfrutar de sus beneficios.

Quizás esta semana también hayáis visto en la prensa que la reina Letizia, de quien conocemos su preocupación por la nutrición y la alimentación saludable, es una gran aficionada a la kombucha. De hecho, ha salido publicado que hace unos días llego un gran cargamento de esta bebida probiótica a Zarzuela por encargo de Letizia y que ha sido justamente ella la responsable de que este té pase a formar parte de la dieta de Palacio.

Al igual que la reina Letizia, otras muchas celebridades también han incorporado este probiótico en su alimentación. Pero, exactamente, ¿qué es la kombucha?

Se trata de una bebidida que se obtiene a partir del té negro o verde y que, gracias a la acción de las bacterias y levaduras que contiene (conocidas como SCOBY), consigue transformar el azúcar en ácidos orgánicos muy saludables. Sus propiedades terapéuticas son apreciadas desde hace siglos y, en muchos países, como en Estados Unidos o el Reino Unido, este té fermentado goza de gran popularidad.

Así pues, son muchos y diversos los beneficios de la kombucha. Sin embargo, estos son los siete motivos por los que, personalmente, creo interesante introducirla en nuestra dieta.

1) Bebida probiótica. Más allá del yogur y los encurtidos, antes apenas consumía alimentos probióticos. Gracias a la kombucha, ahora los tomo prácticamente a diario. Pero ¿por qué deberíamos tomar probióticos? Pues porque nos aportan microorganismos beneficiosos que nos ayudan mejorar la flora, la digestión y el tránsito intestinal, así como el sistema inmunitario.

2) Té saludable. Desde hace tiempo que son conocidas las propiedades saludables del té. De hecho, la misma Universidad de Harvard cree que se trata de una bebida interesante por su alto contenido en polifenoles (antioxidantes). En el caso del té kombucha, al fermentarse, se forma un líquido que contiene, además de los probióticos, vinagre, vitaminas del grupo B, y enzimas y ácidos beneficiosos para la salud. Eso sí, debéis tener en cuenta, a la hora de escoger la kombucha, que tenga un bajo contenido en azúcares y que el envase sea de vidrio, al ser una bebida ácida. Estas son una de las razones por las que la marca Kombutxa es mi preferida.

3) Interesante, más allá de la digestión. Aunque, personalmente, noto sobre todo sus beneficios en la digestión, el té kombucha es una bebida energizante y antioxidante. Se le atribuye, además, la capacidad de mejorar las funciones depurativas a nivel hepático y renal, al mismo tiempo que refuerza el sistema inmunológico.

4)  Alternativa saludable al agua. Es cierto que el agua es la mejor bebida para mantenernos hidratados. Pero beber agua puede ser, en ocasiones, monótono o aburrido. La kombucha es perfecta como sustituta saludable a los refrescas u otras bebidas que tomamos más por placer, que por sed. Para ello, os recomiendo los botellines de 275 ml de la marca Kombutxa, así como su Paleobirra, también a base de té fermentado. Esta última tuve la ocasión de probarla, por primera vez, en la feria All Those Food Market y me encantó.

5) Bebida complementaria a las infusiones. Beber té o una infusión digestiva después de comer es algo que procuro hacer siempre. También antes de ir a dormir. Gracias a la kombutxa, tengo ahora una opción más para mejorar mi digestión. Es perfecta sobre todo en primavera y verano, cuando no apetecen demasiado las bebidas calientes.

6) Remedio post-comilona. Me encanta comer y lo hago de la forma más saludable que puedo. Pero hay ocasiones, por ejemplo, en Navidades, en las que como más de la cuenta y no precisamente alimentos sanos. La kombucha, por sus propiedades digestivas, se convierte entonces en una gran aliada para combatir el malestar.

7) Antídoto para la resaca. Apenas bebo alcohol y, cuando lo hago, es normalmente vino o cerveza. Sin embargo, una de las cosas en las que he notado que, irremediablemente, los años pasan, es en que las resacas son peores (incluso bebiendo poco). También, que mi cuerpo se resiente cuando llevo varios días bebiendo más de lo habitual (Navidades, vacaciones, etc.). Para combatir el malestar derivado del consumo de alcohol, la kombucha es ideal.

Espero que os animéis a probar esta bebida probiótica y compartáis vuestra experiencia con nosotras. Eso sí, os aviso de que, al principio, su sabor puede sorprenderos y no acabaros de convencer. Por esta razón, os recomiendo aquellas kombuchas que ya vienen combinadas con zumos de frutas y, sobre todo, que estén elaboradas con ingredientes de alta calidad.

A pesar de la creciente popularidad del té kombucha, es cierto que todavía puede resultar difícil encontrarla en ciertos establecimientos. Para mí, lo más cómodo es comprar kombucha online.