El artículo de hoy parte de una experiencia personal. Hace unos cuatro años sufrí una infección grave en una de mis muelas, muy dolorosa, tanto en su proceso como también en su tratamiento. La endodoncia a la que me sometieron fue un suplicio, además del evidente desembolso económico. A partir de entonces tomé la decisión de realizar dos revisiones periódicas anuales, durante las cuales mi dentista no solo me controla cualquier atisbo de caries, sino que también me realiza una limpieza bucal completa.
El procedimiento es facilísimo, y viene a costar entre 40 y 50 € dependiendo de la clínica donde te lo hagan. Su duración aproximada es de 30 minutos y para la misma se utiliza un instrumento ultrasónico que remueve la placa y al mismo tiempo enjuaga las encías. En ocasiones puede provocar alguna ligera molestia, sobre todo en aquellas piezas más sensibles y con más sarro. He comprobado que, haciendo la limpieza cada seis meses, la molestia es mínima. Al tener el sarro controlado, la limpieza es mucho más sencilla y menos invasiva. Por otro lado, también se puede optar por una anestesia de aplicación tópica. De esta manera lo único que puede que te ponga nervioso es el ruido que produce el susodicho instrumento.
La segunda fase consiste en un pulido con flúor de toda la dentadura. Si bien lo mejor de este proceso es la estupenda sonrisa que se te queda, también reporta unos beneficios saludables. Y es que hay que recordar que, por muy bien que te cepilles todos los días (o uses el hilo dental), siempre nos quedan zonas difíciles para alcanzar por nuestros propios medios. La limpieza dental realizada por un profesional siempre va a ser mucho más completa.
La enfermedad gingival se produce al mineralizarse la placa bacteriana que se ha ido acumulando. Este depósito duro es el conocido por el nombre de sarro, que ni los mejores cepillados pueden acabar con él. Tu dentista de confianza será quién te recomiende la frecuencia con la que necesitas realizarte las limpiezas. Y no te olvides, como siempre, de cepillarte dos veces al día con una pasta de dientes con flúor.
