Alérgenos en los productos cosméticos

La primera vez que oí la palabra ‘Kathon’ fue el año pasado en una entrevista con la dermatóloga Elena de las Heras, del Hospital Universitario Ramon y Cajal de Madrid, sobre nuestros hábitos de higiene.

El Kathon es la marca comercial de un conservante que combina dos sustancias de nombre imposible, la metilcloroisotiazolinona (MCI) y la metilisotiazolinona (MI), y que está presente en muchos cosméticos y productos para la limpieza del hogar. El problema es que tanto la combinación de estas dos sustancias (MCI + MI), como la MI por separado han demostrado ser muy sensibilizantes y pueden provocar dermatitis de contacto (eczemas).

No pensé mucho más en ello hasta que hace unos meses recibí una nota de prensa de la Academia Española de Dermatología y Venereología en la que se informaba de que «sin duda, el alérgeno más importante de los últimos dos años ha sido la metilisotiazolinona (MI), que está ocasionando una verdadera epidemia de alergias«.

La nota explicaba que este conservante puede encontrarse en toallitas húmedas (toallitas desmaquillantes, para bebés, de higiene íntima, aseo…), jabones de manos, champús, cremas hidratantes, cremas de manos, productos de limpieza (lavavajillas, limpiadores de vitrocerámica), pinturas, barnices, etc.

Por curiosidad, un día me puse a mirar la lista de ingredientes de los cosméticos que usamos habitualmente para ver si lo incluían. No tuve que buscar mucho… metilcloroisotiazolinona y metilisotiazolinona aparecían al final de la composición del champú, el acondicionador y la crema hidratante para el cuerpo; y la metilisotiazolinona, en mis toallitas desmaquillantes, el exfoliante, el gel de baño, la crema de manos y la cera para el pelo. También en la espuma de afeitar de mi marido… Algunos son cosméticos comprados en el supermercado, pero también los hay de marcas que me encantan y no son precisamente baratas.

Esta vez me puse en contacto con la doctora Susana Urrutia, también dermatóloga del Hospital Universitario Ramón y Cajal y especialista en dermatitis, para consultarle todas las dudas.

La doctora me comentó que las personas que ya se han sensibilizado y han tenido una reacción alérgica a esta sustancia deben mirar con lupa los ingredientes de todos los cosméticos y productos de limpieza que utilicen y comprobar que realmente no incluyen metilisotiazolinona o derivados. Para facilitarles la tarea, en el hospital les dan una lista con todos los posibles nombres bajo los que se pueden esconder estas sustancias.

En realidad, según la doctora Urrutia, todos deberíamos evitar usarlos, en la medida de lo posible, y escoger preferiblemente cosméticos y productos que no los lleven, sobre todo si tenéis otras alergias o la piel reactiva.

No debemos confiarnos por el hecho de que nunca nos hayan provocado una reacción. La sensibilización puede producirse por el uso continuado durante años, no tiene porqué producirse la primera vez que usamos productos con MI o MCI + MI.

Sobre todo, estad atentos si utilizáis toallitas húmedas para vuestra higiene íntima o al cambiar el pañal al bebé. Es fácil que estas zonas puedan estar irritadas o haya alguna pequeña herida. Si es así, será más fácil que se produzca una reacción alérgica al entrar en contacto con la metilisotiazolinona. Cuando la piel está ‘abierta’, las probabilidades de que haya una sensibilización a cualquier ingrediente que se le aplique son mucho más altas, especialmente si son altamente alergénicos. Así que cuidado también con los geles y las cremas si tenéis dermatitis atópica. Leed antes la composición y si tenéis cualquier duda, consultadlo siempre con el médico o el farmacéutico.

¿Cómo se manifiesta la dermatitis por metilisotiazolinona? Pues generalmente con la aparición de un eccema (placas rojas que pican, con granitos, ampollas…) aproximadamente unas 48 horas después de haber estado en contacto con la metilisotiazolinona.

Cuando esto pasa, debes acudir rápidamente al dermatólogo para que puedan tratar la reacción alérgica lo antes posible y aliviar los síntomas. Una vez en la consulta, el dermatólogo determinará qué productos pueden haberla provocado y lo verificará realizando lo que se conoce como pruebas epicutáneas (la prueba del parche para las alergias).

Es importante ir al dermatólogo ante la menor sospecha, porque no siempre es fácil intuir qué producto nos puede estar haciendo daño. Puede que llevemos años utilizando un mismo gel de baño sin problemas, pero de repente la marca decide reformularlo e incluye metilcloroisotiazolinona y metilisotiazolinona. Nos sale una pequeña erupción en la piel, pero descartamos que sea el gel porque es ‘el de toda la vida’. Pensamos entonces, que quizás sea la nueva crema hidratante que solo hace una semana que utilizamos. O bien podemos intuir que se trata del gel de baño y lo cambiamos por otro que tiene prácticamente los mismos ingredientes que el anterior. Además, recordad que, como me comentaba la doctora, la alergia puede aparecer de repente tras el contacto continuado con estas sustancias.

No voy a tirar todos nuestros cosméticos con metilisotiazolinona, los acabaré. Pero sí que, a partir de ahora, revisaré la lista de ingredientes antes de comprarlos e intentaré buscar alternativas.