Ya hemos superado el primer mes del invierno, pero no por ello debemos bajar la guardia ya que es tiempo de todo tipo de afecciones de las vías respiratorias. Para protegernos de ello os queremos hablar de las excelentes propiedades antitusivas, expectorantes, demulcentes y antiinflamatorias de las flores de gordolobo. Su nombre técnico es Verbascum thapsus, pero se le conoce popularmente como verbasco o gordolobo. Se trata de una especie natural que podemos encontrar en Europa, Asia occidental, África, Norteamérica y hasta incluso en la cordillera del Himalaya. Sus fantásticas propiedades se conocen ya desde el tiempo de los romanos, y curiosamente en la Edad Media se creía que tenía poderes mágicos contra los malos espíritus.
Se emplea en forma de infusión para tratar distintas afecciones respiratorias, aunque también se usa por vía externa para calmar picaduras, forúnculos, hemorroides, sabañones y diversos procesos de dermatitis.
De manera tradicional el gordolobo es utilizado como antitusivo y antiinflamatorio, especialmente para aquellas personas con problemas pulmonares como el asma, la tos espasmódica o enfermedades derivadas del tabaquismo. Se considera un expectorante suave y uno de los mejores aliados en el tratamiento de resfriados comunes, y la consecuente tos o irritación del área de la faringe.
El té de gordolobo es una infusión a base de hojas, y flores, en algunos casos, que se caracterizan por su coloración amarilla y por un tallo lleno de vellosidades de aspecto blanquecino.
A continuación, os resumimos algunas de sus propiedades curativas:
- Demulcente, gracias a la acción de los mucílagos, uno de sus principios activos. Realiza una acción protectora local, y se comporta de la misma manera que lo hacen las mucosidades en las membranas mucosas. Ideal en tratamientos locales de faringitis y tos.
- Expectorante, actuando directamente sobre el epitelio bronquial, aumentando la producción de secreciones broncoalveolares.
- Antitusivo, de nuevo los mucílagos provocan un efecto calmante en la mucosa respiratoria, inhibiendo la molesta tos que suele aparecer durante estos procesos.
- Antiasmático.
No se lo conocen contraindicaciones, aunque siempre según la creencia popular se dice que no es recomendable para las mujeres embarazadas o durante el periodo de lactancia. Ni en un caso, ni en otro, existen pruebas contundentes que así lo aseguren.
