Este fin de semana, el último del mes de marzo, y como viene siendo habitual, hemos adelantado en una hora nuestros relojes al llamado horario de verano. En 2020 el cambio viene vinculado a una situación sin precedentes derivada del confinamiento por el estado de alarma del Coronavirus Covid-19. Desde Sanitum queremos analizar cuáles son las ventajas e inconvenientes de este cambio, y más teniendo en cuenta la nueva coyuntura.
AHORRO DE ENERGÍA
El Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE) nos dice que cada hogar ahorra alrededor de 6 euros al año en consumo eléctrico gracias al cambio de hora. Este punto sin duda es significativo con la obligatoriedad de estar en casa.
Otros estudios energéticos determinan lo contrario, indicando que el cambio de hora aumenta un 1% el consumo energético en nuestros hogares.
Con toda probabilidad cuando superemos la crisis, y en perspectiva, saldrán a la luz nuevos análisis al respecto.
El medioambiente también se ve beneficiado, siempre que atendamos a la teoría del ahorro. Si se consume menos energía de manera directa se reduce la contaminación que la produce.
MEJORA DEL DESCANSO EN LAS HORAS DE SUEÑO
Más de uno experto acepta el cambio de hora como válido al estar estrechamente vinculado con la secreción de la melatonina, la hormona que nuestros cuerpos segregan para mejorar la conciliación del sueño. Este proceso puede resultar válido para el horario de invierno, ya que al haber menos horas de luz aumenta la secreción de esta hormona.
Por otro lado, al amanecer y anochecer más tarde contaremos con más horas de luz al final del día. Este aspecto se ve truncado por el confinamiento, ya que se supone que esas horas son las que se aprovechan para actividades de ocio en el exterior.
ADAPTARNOS AL HORARIO PARA MEJORAR NUESTRA SALUD
A continuación, te planteamos una serie de consejos que te harán llevar una vida más saludable:
- Tu cuerpo necesita ajustarse al nuevo horario, y la mejor manera de hacerlo es yéndose a la cama un poco antes de tu hora habitual.
- Los primeros días intenta, en la medida de lo posible, no echar siestas, ya que te pueden robar horas de sueño por las noches. Podrás recuperar el hábito de las mismas dentro de unos días.
- La cafeína no es recomendable por las tardes, y más si no estamos siendo muy activos durante la cuarentena. Tu reloj biológico te lo agradecerá. Esto mismo se puede aplicar a las bebidas alcohólicas.
- Estar hidratado es fundamental. Seguro que bebemos menos agua desde que estamos encerrados en casa.
- Hay que levantarse antes por las mañanas para aprovechar bien las horas de luz e intentar, siempre que se pueda, exponernos al sol en terrazas o balcones privados, al menos un par de horas, con el fin de regular el ritmo de sueño-vigilia.
La Unión Europea se ha fijado el objetivo de poner fin a estos cambios de hora, dejando en manos de los países miembros la decisión de cuál prefieren. En España siempre se ha comentado que deberíamos adoptar el horario de Londres, es decir, una hora menos que en el resto del continente europeo, al igual que ocurre en Portugal y las Islas Canarias. La pregunta es si conviene quedarnos con el horario de verano o con el de invierno.
